Harán espionaje ante corridas bancarias y desabastecimientos

Miércoles 8 de julio de 2015
La nueva Agencia Federal de Inteligencia (AFI), creada por la presidenta Cristina Kirchner, dedicará parte de su tarea a combatir los ataques contra el orden democrático provenientes de grupos económicos o financieros. Así lo establece la "Nueva doctrina de inteligencia nacional", publicada ayer en el Boletín Oficial, que explica cuáles serán las atribuciones del organismo creado por ley en febrero en reemplazo de la vieja y cuestionada Secretaría de Inteligencia del Estado.
Entre esas atribuciones se menciona la realización de tareas de espionaje frente a "atentados contra el orden constitucional y la vida democrática, ya sea que se trate de grupos políticos o militares que se alzaren en armas contra los poderes públicos o el orden constitucional o se trate de grupos económicos o financieros -empresas, bancos, compañías financieras- que lleven a cabo acciones tendientes a la desestabilización de gobiernos democráticos mediante corridas bancarias y cambiarias, desabastecimientos, golpes de mercado , etcétera".
Los considerandos del decreto plantean que "la inteligencia nacional es la actividad institucional que se inscribe dentro del marco del Estado constitucional social y democrático de derecho y que apunta a dar cuenta de los desafíos, coacciones y conflictos que ponen en riesgo la defensa y la seguridad democráticas de nuestro pueblo".
Además, se impone a los organismos del Sistema de Inteligencia Nacional que garanticen "la mayor transparencia posible en la administración de los fondos de carácter reservado", a cuyo fin se "aprueba el Régimen de Administración de Fondos de la AFI".
Por otra parte, se constituye una comisión para la creación del Banco de Protección de Datos y Archivos de Inteligencia, que centralizará las bases de datos de los organismos del Sistema de Inteligencia Nacional.
En el anexo del decreto, de 400 páginas, se mencionan también entre las problemáticas los "eventuales riesgos o conflictos generados por agresiones de origen externo" perpetradas por las fuerzas armadas de otros países.
El decreto apunta también a reestructurar y reubicar al actual personal de Inteligencia que "mantendrá sus respectivos niveles, grados y categorías de revista escalafonarios, sin perjuicio de la asignación de nuevas funciones derivadas de los sustanciales cambios previstos en la Ley citada".

Escuchas telefónicas
Por otra parte, el Gobierno hizo efectiva ayer la transferencia del control de las escuchas telefónicas desde la Agencia Federal de Inteligencia a la Procuración General de la Nación, informó el secretario de Inteligencia, Oscar Parrilli.
"Es un día histórico porque después de lo que significó este tema y todas las complicaciones que trajo a la historia argentina, pasará al control de la Procuraduría, un órgano judicial, en consonancia con el avance de la institucionalidad argentina y lo que está pasando a nivel internacional", sostuvo.  "Estamos dando un paso muy importante, que es sacar de la órbita del Poder Ejecutivo las intercepciones de las escuchas por orden de los jueces", agregó.
Explicó además que se prevé la constitución de un capítulo sobre ciberinteligencia, ya que la Argentina "no tenía una política que previera, estudiara, analizara e hiciera inteligencia" en ese campo.
El titular de la AFI destacó que la preselección de quienes integren el organismo se hará a partir de "convenios con universidades públicas, que van a hacer una preselección en función de las necesidades".