Preventiva para Alegre, Godoy y Paz por la masacre de Panambí

Sábado 25 de octubre de 2014
Implicado. | El ex prefecturiano Paz está imputado por "cuádruple homicidio".
A un día de cumplirse cinco meses de la masacre de Panambí, la jueza Alba Kunzmann de Gauchat, titular del Juzgado de Instrucción Uno, dictó la prisión preventiva a los tres imputados del hecho.
En las próximas horas los acusados serían notificados y a partir de ahí sus defensas elevarán una serie de recursos ante la Cámara de Apelaciones en lo Penal, tal como vienen adelantando.
El ex prefecturiano Pablo Paz (51), Juan Godoy (45) y el chapista Marcial Alegre (45) fueron imputados por “cuádruple homicidio calificado” en el marco del hecho que costó las vidas del empresario maderero Oscar Knack (43), su esposa Graciela Mabel Mojsiuk (42) y sus hijos Cristian (25) y Bianca (12).
Se trata de una calificación gravísima, por lo que la jueza que entiende en la causa se tomó un tiempo más que prudencial para mensurar las pruebas existentes en el expediente.
De todas formas, hasta el momento el más complicado de los tres sería Paz, ya que su huella apareció en una caja de zapatos donde los Knack guardaban el dinero; luego su cotejo de ADN fue compatible con una muestra encontrada en un pasamontañas que habría sido hallado en la escena del crimen.
En cuanto a Godoy, la acusación se basaría en el testimonio de Cristian Knack días antes de su muerte, quien habría manifestado que los encapuchados escaparon a bordo de un Volkswagen Bora, similar al coche del imputado.
Con relación al chapista Alegre, lo compromete el arsenal hallado durante el allanamiento de su taller en San Javier y el hecho que se haya mantenido prófugo durante una semana. Más allá de ello, fuentes del caso confirmaron que las armas encontradas en su poder no tienen relación con la masacre de Panambí ni con ningún otro hecho registrado por la Policía de Misiones.
“La jueza tardó cinco meses en dictar la prisión preventiva justamente porque las pruebas son endebles. Además, la Policía dice que llegó al taller por un llamado anónimo que dijo que ahí iban a dar con las armas y la plata del botín. Primero que no encontraron plata; y segundo, para matar a los Knack no dispararon un solo tiro. Es una causa armada en el aire por la urgencia que tiene el Gobierno de dar con algún culpable debido a la magnitud del hecho, que es aberrante por donde se lo mire”, mencionaron desde la defensa de uno de los implicados.
Asimismo, se mostraron confiados en que prosperarán los planteos ante la Cámara de Apelaciones. “Tanto se habla de la huella de Paz, pero en realidad es media huella y con eso no se puede condenar a nadie. Una y otra vez los tres acusados declararon que no tienen nada que ver, pero siempre hay perejiles y en este caso, por la masacre que hicieron con las víctimas, las autoridades los quieren hacer pagar por un delito que no cometieron”, subrayaron.
En ese marco y tal como publicó este medio, el ex prefecturiano Paz denunció un presunto “encubrimiento policial a los verdaderos autores” de la masacre de Panambí, ya que tendría argumentos suficientes para demostrar su inocencia y el armado de la causa en su contra.
En su denuncia realizó un pormenorizado detalle de las actividades que realizó el 25 de mayo, negó cualquier participación en los hechos y subrayó que ni siquiera conocía a los Knack. Aseguró que nunca les compró madera, no conoció el aserradero ni tuvieron trato comercial alguno.
Hasta ahora, ninguno de los testigos citados a declarar, entre ellos Carlos “Nano” Knack (20), el único sobreviviente de la masacre, logró identificar a Paz, Godoy o al chapista Alegre. Tampoco hay pistas sobre posibles cómplices de los detenidos, ya que desde un primer momento las víctimas indicaron que fueron cinco los autores del hecho.