Con chipa y mate cocido, el cine misionero conquista el Cervantes

El cine misionero se proyecta en la sala Trinidad Guevara del Teatro Nacional Cervantes, que todos los miércoles abre sus puertas en forma libre y gratuita para que el público porteño pueda ver las películas que se hacen en la tierra colorada.
A lo largo de mayo, se exhibieron cortometrajes y documentales realizados por directores misioneros que muestran diversas miradas sobre la realidad de la provincia, que abarcan la historia, costumbres y saberes de su población y que lograron atraer un número creciente de público interesado en conocer las producciones.
Las proyecciones de las películas misioneras forman parte de un programa llamado El Cine del País Federal, que se desarrolla desde el año 2006 en el área de extensión cultural del Teatro Cervantes, con el objetivo de brindar un espacio de este tradicional teatro porteño a la muestra de las creaciones cinematográficas realizadas en el interior del país como aporte a la difusión del arte nacional.

El Territorio asistió el miércoles pasado a la proyección del cortometraje denominado Origen Chapa, el retrato de un pueblo, de los jóvenes directores Axel Monsú y Guillermo Rovira, que cuentan la historia de la localidad de Colonia Alberdi, población originalmente denominada Colonia Chapá, en honor a un cacique guaraní, que a partir de 1956 logró el rango de municipio y cambió su nombre por el actual. 
Al terminar la proyección del corto, este diario pudo hablar con parte del público que asistió al evento que se mostró entusiasmado con la idea de poder acceder a diversos aspectos de las múltiples culturas que pueblan nuestro país y que pocas veces llegan a la pantalla grande.
“Por ejemplo, esta película que acabamos de ver fue muy interesante porque nosotros ni siquiera sabíamos que existía esa comunidad en el interior de Misiones con tanta riqueza desde su génesis con los inmigrantes hasta el presente”, señaló Norma Lontrato, una docente jubilada experta en transitar el circuito cultural gratuito que ofrece la ciudad de Buenos Aires.
A la función también asistieron estudiantes de cine y comunicación de diversas facultades locales, interesados en conocer el arte que se realiza en todas las provincias argentinas y que en el caso de Misiones es realmente interesante, no sólo por la variedad de material que hay por mostrar, sino  por el creciente número de artistas de la plástica, pintura, literatura,  música y cine que producen en distintas ciudades de la provincia.
El productor general del ciclo Cine del País Federal del Teatro Cervantes, Oscar Pérez, explicó a este medio: “Hay una creciente inquietud en el público local por conocer el cine y el arte de todo el país y en ese sentido la oferta cultural de Misiones resulta muy atractiva, porque trajeron a lo largo de este mes de mayo a músicos, cocineros, pintores, artesanos y cineastas que tienen mucho para mostrar sobre sus lugares de origen”.
Este miércoles finaliza el ciclo de cine misionero con la presentación de Mis sucios tres tonos, de Juan Manuel Brignole.
En la lista de realizaciones también se encontraban No hay tierra sin mal, de Belén Bianco y los cortometrajes Jasy Pora (luna hermosa), de Cecilia Sandoval y Pavel Tabares; Dentro, de Federico Jacobo; Orilla, de Lucía Orlando y La Tota, de Cinthia Konopacki.
Cine con chipa y mate cocido
Durante el mes de mayo, se exhibieron en la Sala Trinidad Guevara distintos cortometrajes realizadas en Misiones, que fueron amenizados con una previa de degustación de bocaditos dulces y salados acompañados con mate cocido. Los chefs encargados de armar la merienda misionera en el Teatro Cervantes fueron Tomas Carmona y Adrián Sevi que se lucieron con pequeñas tortas individuales de queso, muy parecidas en sabor a la tradicional chipa y magdalenas saborizadas con mandarina y yerba mate.
“Intentamos presentar una merienda que resalte parte de los principales gustos de Misiones que tienen que ver con la yerba mate, el queso y los sabores frutales”, explicó Adrián Sevi.
La merienda misionera se sirvió antes de la proyección de las películas en una sala contigua al cine, que fue decorada con pinturas de la colección Mi paraíso perdido, de la artista Viviana Kert y con antiguas vitrinas del teatro que alojaron artesanías de distintos municipios de la provincia.
“Esta muestra pretende ser un combo integrado por obras de diversas talentos de nuestra provincia que supieron plasmar ya sea en una artesanía, pintura, comida o película, parte de nuestra identidad cultural”, señaló Pretto, de la Casa de Misiones.