Crece la polémica entre Gobierno y empresarios

Sábado 25 de octubre de 2014
El enfrentamiento entre el Gobierno y los empresarios y economistas que asisten al Coloquio del Instituto para el Desarrollo Empresarial de la Argentina (Idea) se intensificó ayer con declaraciones del jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, el ministro de Economía, Axel Kicillof, y participantes del encuentro en Mar del Plata, en torno a la vigencia del modelo económico oficial o bien su agotamiento.
En el cruce de opiniones se destacó la del gobernador de Buenos Aires, Daniel Scioli, quien si bien participó del Coloquio y no concurrió al contraacto organizado por el kirchnerismo en la misma ciudad, ayer renovó su alineación con el Gobierno de Cristina Fernández.
Capitanich recurrió a la ironía al decir que "en el Coloquio de Idea, no tienen ideas" y pidió a los empresarios que se "preocupen" por "identificar nuevos mercados" en lugar de la "permanente intriga" y la "conducta especulativa" que les adjudicó.
Por su parte, Kicillof calificó de "caricaturesco" al evento, del que dijo que "debería llamarse Coloquio ni una idea", y advirtió que muchos de sus participantes tienen "un doble discurso" respecto al Gobierno.
Scioli, luego de participar en la apertura del Coloquio, afirmó que fueron "ingratas e injustas" algunas expresiones de empresarios en Mar del Plata y les pidió que hagan un debate de "propuestas e iniciativas" y "que no se queden solo en la crítica".
"No se puede desconocer que a lo largo de estos años han crecido todos los sectores productivos", sentenció Scioli en conversación con radio Mitre y añadió que "esto no significa desconocer las dificultades coyunturales que puede haber, pero que se van a superar".
En cuanto a su participación en la apertura del coloquio, a pesar de las fuertes críticas que algunos empresarios formularon contra el Gobierno, el mandatario provincial respondió que "tuvo sus diferencias", pero remarcó que las dijo "de frente, durante el discurso" del pasado miércoles.
En respuesta al oficialismo, el presidente del Banco Ciudad, Rogelio Frigerio, sostuvo que, más allá de las ironías de Capitanich, no le preocupaba "tanto que haya empresarios que no tengan ideas, es más preocupante que el Gobierno no tenga ideas", dijo Frigerio en declaraciones a DyN.
En el mismo sentido se expresó el jefe del equipo económico del Frente Renovador, Ricardo Delgado, para quien una opinión como la del jefe de Gabinete "forma parte de lo que se está yendo".
"Forma parte de esta lógica del descrédito por la opinión del otro, creo que este tipo de eventos son útiles para empezar a construir la Argentina que viene, en términos de visiones, de ideas, de que los empresarios puedan escuchar lo que ofrecen los candidatos", remarcó Delgado ante la consulta de DyN.
El gerente de la Cámara de Importadores de la República Argentina (Cira), Miguel Ponce, advirtió que "las cosas no están bien" en la Argentina y uno de los mayores problemas es la "inflación".
Al evaluar que el país transita un "fin de ciclo", Ponce replicó las declaraciones de Capitanich: "me parece positivo lo que está pasando en este Coloquio porque si el Gobierno lo critica, algo está pasando, lo están notando y, como sociedad, debemos observar en lo que viene", afirmó.
La nota discordante dentro del empresariado la dio el presidente de Laboratorios Richmond, Marcelo Figueiras, quien criticó la "visión apocalíptica" de quienes "no reconocen ninguno de los logros" del gobierno kirchnerista y consideró que no están "en un fin de ciclo, sino en el principio de ciclo, el de la inclusión".


El dato 76%
De inflación anual desde 1944 tiene el país, según datos aportados durante el Coloquio por el economista Orlando Ferreres. Y dijo que habría 8 millones menos de pobres si la inflación se hubiera contenido.


Siete décadas de inflación El economista Orlando Ferreres cuestionó ayer a los distintos gobiernos que hubo en la Argentina desde 1944 por no haber contenido la inflación de las últimas siete décadas y sostuvo que si se hubieran aplicado "políticas responsables", el país "tendría ocho millones menos de pobres". "Si la Argentina no hubiese tenido un promedio del 76% de inflación anual desde 1944, el país tendría ocho millones menos de pobres", señaló Ferreres al participar de uno de los paneles en el Coloquio de Idea. El economista agregó que "si el 70% de este dinero, que se fugó del circuito económico del país, se hubiera reinvertido, alcanzaría para que la pobreza, que según un informe de la UCA es del 27,6 por ciento y representa a 11.604.000 de personas, se reduciría a 3.600.000 de pobres, igual que los niveles de Canadá".
Ferreres criticó "la falta de reacción de los gobiernos desde 1944, la falta de políticas responsables para frenar la inflación" ya que, advirtió, "ese alto porcentaje esmerila cualquier tipo de crecimiento".
El economista también indicó que "la Argentina pasó de ser un país confiable por su economía hace un siglo, a uno de default en 2014".
Así, Ferreres sostuvo que en nuestro país "el capital intangible es uno de los más importantes y se evalúa por el respeto de las leyes, el cumplimiento de los compromisos y el nivel de nuestras instituciones, y allí estamos en deuda. Estamos obligados a aumentarlo".


Achicar un dígito la inflación llevará cuatro años Mar del Plata. Economistas referentes de la oposición coincidieron ayer en que un programa de combate a la inflación podría demorar hasta cuatro años para alcanzar la meta de un dígito anual de aumento de precios.
Así lo indicaron ayer Miguel Bein (referente de Daniel Scioli), Francisco Cabrera (PRO), Ricardo Delgado (Sergio Massa) y Javier González Fraga (Unen), quienes se pronunciaron en contra de aplicar una devaluación de la moneda.
Convocados para el 50 Coloquio Anual del Instituto para el Desarrollo Empresarial de la Argentina (Idea), los cuatro referentes se pronunciaron en favor de aplicar políticas gradualistas para equilibrar la economía.
"Esto requiere abordaje gradual, que quiere decir serio, firme e inteligente. El abordaje es gradual. Me gustaría que en 4 años podamos llegar a la zona de un dígito", dijo Bein.
Cabrera señaló que "no es inmediato ni automático derrotar la inflación hasta un dígito" mientras que Delgado la definió como "la madre de todas las batallas".
Por su lado, González Fraga consideró que en Unen "hay consenso en que se puede bajar en cuatro años", pero aclaró que el éxito "depende de que haya un presidente, un Banco Central y todo en gobierno comprometido con el objetivo".
En relación al tipo de cambio, González Fraga consideró que la corrección "se hace controlando las expectativas de inflación".
"Cuando se elimina la anarquía de expectativas, a partir de ello se puede comenzar a corregir el tipo de cambio", añadió.
Al respecto, Bein coincidió con Fraga y aclaró que "no hay un único tipo de cambio de equilibrio", mientras que Delgado aseguró que "no se pueden corregir problemas de competitividad con una devaluación".
Respecto del atraso de las tarifas, los referentes económicos también coincidieron en la necesidad de eliminar subsidios.
Con un escueto "sí", Bein dejó en claro que el aumento de las facturas de servicios públicos es un tema desagradable de abordar para el próximo presidente, y generó risas entre los empresarios.
Al respecto, Cabrera se pronunció en favor de eliminar los subsidios en principio "al 20 por ciento de la población mas rico", mientras que González Fraga dijo que Unen propone "subsidiar con la tarjeta Sube a los sectores de mas bajos recursos".
Al cierre de la charla, los cuatro economistas evaluaron con nueve puntos el nivel de coincidencias que encontraron en sus propuestas para un próximo gobierno.
Por su lado, la presidenta del Coloquio de Idea, Isela Costantini rescató ayer el valor del diálogo y separó el "espíritu" de la temática que se aborda en esta edición número 50 del tradicional encuentro empresarial, dedicada "a entender por qué" la Argentina es recurrente en sus problemas, de "un par de frases" del discurso de apertura del titular de la entidad, Miguel Blanco que irritaron al Gobierno.