Encuentra juego y pisa tierra firme

Otro equipo se presentó en Villa Sarita. Opuesto a lo que pasó en Caballito, con otras realidades y diferentes capacidades. Como si quisiera, Guaraní volvió a generar un lamento algo feliz en su gente. Lamento porque el fútbol apareció tarde, pero felicidad porque finalmente llegó. Anoche, por la 20ª fecha de la zona A de la B Nacional, la Franja volvió a sentir la camiseta y lo sufrió Douglas, que se llevó un 3 a 1 en contra de manos de un local efectivo.
Sergio Sagarzazu y Cristian Barinaga, por duplicado, marcaron los tres goles del conjunto dirigido por José María Bianco, que despertó aplausos en el Clemente Argentino. Fernández, ya en el último minuto, descontó para los de Guglielminpietro.
Por esas ganas que encontró Guaraní en el último trayecto de la B Nacional, el inicio del partido fue determinante para el andar posterior. A los 3 minutos, cuando Douglas Haig ni siquiera había tenido contacto con la pelota ni pisado el césped rival, Sergio Sagarzazu remató fuerte y abajo. Perafán se estiró, aunque para ver más de cerca cómo su valla era vulnerada.
Sólo se había acercado una vez Guaraní, pero ya se ganó un córner que aprovechó al máximo. Ese gol anesteció un partido que Douglas no podía perder, pero que tampoco hizo mucho como para cambiar ganar. La visita ni siquiera recibió órdenes desde un banco de suplentes adormecido, no generó ni con Borrego, mucho menos con Carabajal, sus piezas de creación.
Al marcar, la Franja administró el duelo, se volvió a alejar del equipo apresurado y por eso cerró la primera parte con esa pequeña pero merecida ventaja. Para volver a encontrar alguna emoción hubo que esperar hasta los 30’. Allí Osvaldo Young, que volvió al primer equipo, remató de aire y centímetros fuera del arco rival.
La visita no se acercó nunca a De Olivera, quien habrá tenido uno de los partidos más tranquilos desde su llegada a Misiones.
Y si en el primer tiempo Guaraní arrancó encendido, lo del complemento fue una reacción potenciada. Dos minutos pasaron para el 2 a 0 y doce para el tercero. Ambos llegaron en los pies de un Barinaga que materializó la mejora que había mostrado hace varios partidos. El 10, que estuvo en duda por lesión, primero remató desde afuera del área tras un pase atrás de Young. Lo hizo fuerte, con decisión y efectividad.
Diez minutos más tarde, volvió a recuperar una pelota en su propio campo y, con todo Douglas en ataque, no tuvo contra para llegar hasta el área. No le importó que Narese tuviera mejor ángulo de tiro y prefirió la personal. Dejó tirado a Gioda, también a Flores, al tiempo que el achique de Perafán no fue efectivo. Barinaga remató al palo derecho y sentenció la historia.

Por Emiliano Andreoli