Monumentitis II

Viernes 22 de agosto de 2014

Además de Cristóbal Colón, Juana Azurduy, Perón  e Irigoyen, Astor Piazzola tendrá su monumento.
Doce años después de que una ley obligara a emplazarlo en Avenida del Libertador y Callao, dentro del parque Thays, finalmente su verá la luz en 2015 en la cuadra de la peatonal Diagonal Norte, entre Cerrito y Libertad. El cambio de lugar será aprobada antes de fines de año y cerraría una historia de demoras y desidia que impidieron durante más de una década que la ciudad rindiera justo tributo al compositor y bandoneonista, lo que nos recuerda a los misioneros la tardanza para que Andresito tuviera el suyo en la ciudad porteña, como lo soñara Cleto Rauber. El monumento de Piazzola simboliza la silueta de un bandoneón en una serie de doce cuadros desplazados a lo largo de una curva, será construido en acero inoxidable y se montará sobre dos bases rectangulares. Fue ideado por el artista plástico Carlos Martínez, quien en 2009 ganó el concurso convocado por una comisión que integraron representantes del gobierno de la ciudad y de la Fundación Piazzolla.
Ya habían pasado seis años desde que, en 2003, la ley 1132 había establecido emplazar el monumento en el espacio verde situado en Libertador y Callao, pero luego de la convocatoria al concurso y la selección de la propuesta se advirtió que en el lugar escogido ya había un monumento dedicado al jefe de policía Ramón Falcón que fue dispuesta allí por la ley nacional de 1912; y que por otra ley de 1969 se autorizó a trasladarlo al Departamento Central de Policía, pero la mudanza jamás se concretó. Carlos Martínez, el artista plástico ganador del concurso confirmó que ya reformuló el proyecto para adecuarlo al microcentro porteño, la obra tendrá una altura de alrededor de cuatro metros y el último costo estimado fue de un millón de pesos, que deberá actualizarse y, probablemente, se le asignará una partida en el presupuesto oficial para 2015. Avanza, como se ve, la monumentitis nacional.


Aguará-i