La Renga hizo vibrar a sus fanáticos en el Atlético Posadas

Domingo 28 de agosto de 2016 | 16:27hs.

Cerca de siete mil personas se congregaron ayer en el Club Atlético de Posadas para disfrutar del recital que la mítica banda de rock nacional, La Renga, brindó en Misiones tras diez años de ausencia. Entre los presentes, hubo fanáticos que acompañaban la gira de la banda desde Buenos Aires, Córdoba, Chubut, Neuquén, Santa Fe, así como seguidores de Corrientes y países vecinos.

 

En la previa, el grupo local Néctar se encargó de telonear a los de Mataderos, con muy buena recepción del público misionero y foráneo.

 

 

La euforia comenzó pasadas las 21.30, cuando Gustavo Nápoli se presentó en el escenario acompañado de su guitarra y esbozó los primeros acordes de “Corazón Fugitivo”, secundado por el bajo de Gabriel “Tete” Iglesias. Tras la apertura, llegó el saludo obligado a la tierra colorada, y luego las interpretaciones de “Almohada de Piedra” y “Nómades”. Además de los temas del último disco titulado “Pesados Vestigios”, sonaron los clásicos como “En el baldío” y “La Razón que te demora” y “Cuando estés acá”.

 

Pasadas las 22, sonó el himno renguero “Balada del diablo y la muerte” y los invitados a la misa rockera se congregaron frente al escenario atraídos por la clásica melodía.

 

A lo largo de la noche, Nápoli se mostró sorprendido por el denso polvillo rojo que se levantaba sobre el escenario tras cada tema pogueado. No faltaron alusiones al calor y a la tierra roja, que impregnada sobre los rostros de los paladines del rock, se transformó en un souvenir del concierto, según lo definió el propio vocalista.

 

Antes de la despedida, y tras más de dos horas de recital, el grupo prometió volver a la capital misionera antes de que se cumpliera una nueva década de ausencia. El anuncio desató una oleada de banderazos y cánticos de aprobación.

 

“Queridos amigos y amigas de Misiones, la verdad que hemos pasado una noche maravillosa. Esperamos volver más seguido. Nos llevamos toda la tierra roja que hemos tragado, y un recuerdo hermoso de esta noche”, resaltó la voz de La Renga, que en guiño cómplice empuñó nuevamente su guitarra para el tema de cierre, “Hablando de la libertad”.