Capacidad y talento al servicio de otros

La Epet Nº 18 de Puerto Esperanza dejó un emotivo mensaje tras la gala de premiación del Misionero del Año: poner la excelencia al servicio de los otros. “Que nuestras capacidades y talentos estén para aquellos que más necesitan”, dice con orgullosa la directora de la institución, Fernanda Lenguaza.
Ayer, la comunidad educativa fue distinguida por los lectores de El Territorio y terminó compartiendo la terna con el poeta Ramón Ayala y Cristian Cañete, fundador de Los Caras Sucias. Facundo Yaculowski, Mauro Silvero, Belén Gauto, Mélani Litman y Emmanuel Díaz, junto al profesor Edgardo Doberstein fueron los creadores de las prótesis mecánicas utilizando impresoras 3D, mérito que le valió ser parte de la lista de nominados.
Uno de los beneficiarios fue Fulgencio Sanabria (51) de Puerto Leoni, quien había perdido parte de la mano izquierda en un accidente en un aserradero. Con la ayuda de los adolescentes, el hombre pudo volver a tomar objetos con su mano, 20 años después del siniestro. El otro favorecido fue Claudino Portillo (53) de Eldorado, a quien le están construyendo una prótesis adaptada, ya que perdió tres dedos tras un percance, también, en un aserradero.
La Epet Nº 18 comenzó a funcionar en el año 2008 con una matrícula de 30 alumnos y en la actualidad cuenta con una matrícula de 410. Este año tienen además la alegría de contar con edificio propio y esperan la inauguración de más infraestructura para el desarrollo de los talleres. Pero los planes no concluyen allí, también buscan consolidar el plantel docente.
“A los alumnos Mauro y Emmanuel - dos de los jóvenes que hicieron posible este proyecto-  les han prometido desde Ministerio de Educación otorgarles una beca, su situación económica es apremiante. En el caso de Emmanuel, sus padres sólo viven de changas. Muchos desean estudiar ingeniería, así que mi deseo como responsable es contar con recursos humanos para iniciar el Proyecto de Incubadora Tecnológica, espacio que iniciamos este año, junto al profesor Edgardo”, comenta la directora.
“El mensaje es para toda la población estudiantil: que busquen a través de la educación y capacitación autodidacta, encontrar los valores, los talentos, el perfil de cada uno y a partir de ahí, comprometerse con la excelencia. Eso es lo que sucedió con estos chicos -en referencia a sus alumnos -; descubro en mí, un talento y quiero ponerlo en valor (…) la excelencia al servicio de otros”.