BNacional: Crucero perdió 3 a 2 ante Boca Unidos

Domingo 25 de junio de 2017 | 19:12hs.
Fùtbol | Foto: Sixto Fariña

Crucero perdía 3-0 y más allá del ímpetu y la determinación que mostró en la última media hora de partido, perdió 3-2 con Boca Unidos de Corrientes un encuentro clave en la lucha por mantener la categoría en la Primera B Nacional.

 

El conjunto misionero se jugaba mucho más que tres puntos ante un rival que llegaba muy golpeado y con la derrota quedó muy cerca de ingresar a la zona roja de los promedios. 

 

A los 11’, y tras el primer tiro de esquina del visitante, el zaguero Ariel Morales entró a buscar con decisión y en la boca del arco conectó muy abajo el remate que se estrelló en el travesaño y salió. Las obligaciones del Colectivero chocaron con las mismas urgencias de su rival, y en este contexto la zona media fue un sector de libre tránsito y el partido se hizo de ida y vuelta. Recién a los 22’ el local llegó con claridad cuando Ojeda le tapó un potente remate a Dujaut y Vera Piris no pudo definir cómodo en segunda instancia. Lippi armó un llamativo 4-1-3-2 pero los encargados de elaborar juego no siempre pudieron conectarse. Para colmo de males, luego de un nuevo balón detenido a los 42’, Nicolás Castro tomó a Ortiz dentro del área, Pablo Giménez no dudó y pitó penal para el equipo correntino, que Martín Fabro, con un remate bajo, a la derecha de Arce, transformó en el 1-0.

 

Con la urgencia de lograr el empate, en el segundo tiempo Crucero salió a jugar desarmado y desordenado. A los 5’ de iniciado el complemento el fondo quedó mal parado en una contra correntina, nadie hizo el retroceso y Miño, con una terrible volea de primera, ajustició a Arce para ampliar el marcador. Y 60 segundos después, con la bronca todavía a flor de piel, Lechner cometió un claro penal y nuevamente Fabro, desde los doce pasos, marcó el lapidario 3-0.

 

El inmediato descuento de cabeza de Ostrowski, a los 11’, revivió un poco una esperanza que parecía perdida y sirvió de empuje anímico en busca de la hazaña.

 

El milagro comenzó a hacerse realmente palpable a los 26’, cuando el recientemente ingresado Braian Perussato encontró una pelota perdida entrando por el segundo palo y con un remate cruzado bajo achicó la brecha: 2-3 y a matar o morir.

 

A los 32’ fue Nicolás Castro el que tuvo el empate en sus pies ante una mala salida de Ojeda, pero Baroni se vistió de héroe y despejó sobre la línea. Los últimos 15 minutos fueron de total dominio del Colectivero que pese a tener la pelota y crear algunas que otras situaciones del gol no pudo llegar al empate.