Saber discernir

Sábado 7 de enero de 2017

Mis queridos vecinos, mis Queridos Viejos, su familia, su entorno, comunidad, ustedes deben saber que: Insisto una vez más que los que hemos llegado a una avanzada edad en la vida, y se ha formado una familia, nuestra felicidad es jugar con los hijos de nuestros hijos y los hijos de los amigos, admirar, recibir y llenarnos de esa sabiduría que da sentido a la vida y Gusto a todo lo que hacemos.
La palabra clave es Gustar. En latín es Sapere y de Sapere viene Sapientia que es Sabiduría. Ignacio escribía que el fin de sus ejercicios espirituales es enseñar a sentir y gustar de las cosas intensamente. El salmo dice que “La Boca del Justo Meditara la Sabiduría”, al pronunciarla, al saborearla, al paladearla y rumiarla para que entre No solo en su mente y en su entendimiento sino en su cuerpo entero. Vivimos un intelectualismo, exagerado y nos ha privado del contacto con los sentidos, del placer de ver, oír y sentir.
La clave de todo es saber a través del discernimiento, distinguir sin error lo que es sano de lo nocivo, lo justo de lo injusto, la verdad de la mentira …

El saber discernir nos permite agradar y disfrutar relajándonos, momentos íntimos. Recuerdo diálogos con mi padre cuando me contaba de en medio de la selva misionera, en un rosado, bajo un techo de tacuaras y palmeras con lluvia intensa junto al calor de un fogón mateando y disfrutando un charque. Ver el verde intenso de las plantas, correr el agua y en ese momento agradecer al “Maestro” del más allá. La familia que tenía y que no le faltaba un techo, alimento y ropa. Tantas veces me recordaba: Te dejo un buen nombre y apellido, no lo manches.
Me marcó a fuego, tengo su mismo nombre y falleció el día de mi cumpleaños!!!
Él fue el primer veterinario en la provincia y recorría a lomo de mula, picadas y caminos. ¿Será por ello que me gusta tanto la ecología?
Me gusta hurgar en el pasado y rendirle culto a los pioneros y nativos de mi provincia. Es por ellos que ustedes, Mis Queridos  Viejos, todos juntos sigamos luchando prudentemente para que nos den lo que nos corresponde; “El Don de Vivir, el don de Apreciar la Vida, el aire, el agua, los  pájaros, la Paz, el Amor al prójimo, el respeto mutuo.
Debemos tener Fe en el 2017 y ver que podemos hacer nosotros intergeneracionalmente.
Adelante, siempre adelante, tiende la mano, ayuda a tu prójimo que nos necesita. 

El viejo Miérez