La actividad acuícola ya tiene reglamentada su ley

Sábado 9 de septiembre de 2017

La Ley de Acuicultura fue reglamentada a inicios de esta semana . La normativa había sido aprobada por el Congreso de la Nación a fines de 2015. La reglamentación era la última instancia del proceso comenzado con la sanción de la ley que dotará a la actividad acuícola de un marco normativo para su regulación, control, fiscalización y fomento.
 "Esta ley a la que ahora la provincia deberá adherirse, contempla más ayudas para la mejora del sector piscícola. Habrá aportes reintegrables para pequeños productores y para pequeñas industrias que procesen hasta mil toneladas de pescados", comentó a El Productivo Guillermo Faifer, director general de Piscicultura del Ministerio del Agro y la Producción de la provincia.
"El productor misionero logró involucrarse con la piscicultura y diversificó  su chacra con esta actividad que le deja un ingreso económico importante", aseguró. Y detalló que según el último censo, Misiones tiene unos 3.780 productores que se dedican a esta actividad. El 10 por ciento produce con fines comerciales para vender su peces a pie de estanque y el resto produce para autoconsumo.

"Esta actividad requiere de técnicas y procesos para obtener una producción adecuada. La capacitación es fundamental, como así también el diseño y la planificación del emprendimiento piscícola", añadió.
El funcionario destacó que la comercialización de pescado vivo o faenado a “pie de estanque”, permite al productor venderlo directamente al consumidor. Esta estrategia es muy exitosa, pero para que perdure en el tiempo, requerirá que los productores se organicen y ordenen sus cronogramas de cosecha, como también los puntos de venta.
El subsecretario de Producción Animal, Cesar Berger, explicó que “La Ley de Acuicultura es muy importante, ya que por medio de la misma bajarían fondos para seguir desarrollando la actividad en la provincia, tanto para los pequeños productores, con la formación de tajamares o el Centro Genético en Candelaria, como para el repoblamiento de los diferentes arroyos y ríos de Misiones”.
Y destacó: “La ley pone a la Acuicultura como una producción agropecuaria y eso lleva a muchos beneficios, como impositivos, por ejemplo”.
Así con esta normativa reglamentada, serán muchos los beneficios que traerá para el sector.
La norma prevé la creación de un Fondo Nacional de Acuicultura (Fonac) que dispondrá de una partida del presupuesto nacional por diez años. Dicho Fondo podrá otorgar asistencia financiera a los proyectos de pequeña escala y a las Pyme que produzcan un máximo de 1.000 toneladas.
Además, implica beneficios impositivos por diez años para los productores, que incluyen deducciones a impuestos provinciales de bienes personales e ingresos brutos, amortización anticipada del valor de las maquinarias adquiridas y eliminación de aranceles de importación de aquellas maquinarias que no se producen a nivel nacional.
Y se podrá sancionar prácticas nocivas para los recursos naturales y los organismos acuáticos, promoverá la investigación científica, el agregado de valor y desarrollo socioeconómico, cultural y profesional de los actores del sector.
Según el subsecretario de Pesca y Acuicultura de la Nación, Tomás Gerpe, “el decreto reglamentario de la ley de acuicultura es un gran beneficio para aquellos que tienen en vista la actividad ya que les brinda un marco normativo y establece el acompañamiento del Estado en cuestiones impositivas, asistencia en infraestructura, entre otros. Se da, así, el primer paso para el desarrollo de una actividad incipiente en nuestro país pero con un gran potencial, generando impacto positivo en las economías regionales: creación de nuevas pymes y nuevas fuentes de trabajo
Si bien el volumen de producción de acuicultura en el país continúa siendo pequeño (3.712 toneladas en 2016), existe un enorme potencial de crecimiento dada la existencia de recursos naturales y aguas de calidad, la amplia disponibilidad de insumos para producción de alimento balanceado, la existencia de instituciones de enseñanza, investigación y desarrollo, y la imagen positiva que tiene Argentina como país productor de alimentos. En ese sentido, organismos internacionales como la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) sostienen que Argentina es uno de los principales países con potencial para el desarrollo de la actividad.
Las principales especies producidas actualmente son el pacú (52% del total producido), la trucha (38%), la carpa (3%) y el surubí (2%), con una participación mayoritaria de proyectos ubicados en las provincias de Misiones, Buenos Aires, Neuquén y Chaco. En ese sentido, este sector puede jugar un rol fundamental en la generación de empleos y en la promoción del desarrollo económico de dichas provincias.